Sin merecerlo, nos gano la desgracia
01 de Abril de 2011.-
Cambiaron los nombres, pero Gimnasia volvió a cometer los mismos errores y perdió un partido que por momentos parecía tener controlado. Los pibes no decepcionaron y dejaron todo en la cancha, sin embargo esto no alcanzó para evitar una nueva caída del equipo dirigido por Ángel Cappa.
La semana pasada, este medio titulaba antes que lo reconozca su propio entrenador que el Lobo había perdido por fallar en las dos áreas y hoy la historia se volvió a repetir. Desperdició varias situaciones claras de gol y en las conquistas de Independiente hay un grosero error de Gastón Sessa en el primero y un mal retroceso de los volantes y los defensores en el segundo.
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Independiente salió momentáneamente de su mal momento y venció a Gimnasia y Esgrima La Plata, por 2 a 1, en el partido que abrió la octava fecha del certamen.
Esto más allá de que Abel Masuero abrió la pizarra en el 'Bosque' para los anfitriones a los 18 minutos. El zaguero ganó por arriba y con un testarazo puso adelante a los suyos.
El Rojo empató los cartones hasta el complemento (al 54'). Luego de un servicio de Maximiliano Velázquez, Andrés Silvera la clavó en las redes, con lo que niveló las acciones.
Apenas dos minutos después, la visita se quedó en inferioridad numérica debido a la expulsión del defensor Carlos Matheu.
El Tripero, que echó de más a Guillermo Barros Schelloto, no aprovechó la ventaja numérica y lo pagó con una derrota en tiempo añadido, a los 91', gracias al tanto de Cristian Pellerano.
Con este resultado, el Rojo cortó una racha de 16 años sin traerse los tres puntos del 'Bosque'
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El Rojo sufría en el Bosque, perdía 1-0 y no era peor por la mala puntería de Gimnasia; pero Silvera (con ayuda de Sessa) y Pellerano (en tiempo cumplido) lo dieron vuelta. Independiente ganó después de 16 años en La Plata.
No hay caso. Gimnasia no puede ni cuando hace las cosas como para llevarse los tres puntos. Los nervios juegan cada vez más y a pesar de tener Masuero, no puede salir de internación. Si hasta Independiente, que no ganaba en el Bosque desde 1995 y llevaba 22 partidos sin triunfos como visitante, rompió esa racha con un jugador menos.
Sí, le pasan todas al Lobo. Porque en el primer tiempo, al toque de que Aued metiera un buen centro y Masuero abriera el marcador, Lucas Castro tuvo el segundo pero su gran definición dio en el palo. Mala Pata. Antes del descanso tuvo un par para aumentar, y a la vuelta del mismo, sufrió una mala jugada de Sessa, que le dio el empate a Silvera. El Rojo tenía un esquema más arriesgado tras la variante de Parra por Vélez a la media hora de juego.
En un minuto pasó de todo. Después del gol del Cuqui Matheu vio la roja por segunda amarilla. Con Córdoba (entró por Romea, que cumplió) y el Maestrico, los de Cappa fueron a buscar el triunfo, pero el nerviosismo les sacaba claridad. Otra vez, algunas situaciones merodeando el arco de un Assmann, al que se lo vio muy seguro. En el medio, las amonestaciones de Neira y Rinaudo, que acarrean suspensiones.
Y lo peor para los locales llegó en el cierre. Un contragolpe bien realizado por los de Avellaneda, derivó en Pellerano llegando como nueve y liquidando al Lobo. Demasiado premio para el Rojo y un castigo enorme para GELP. Gimnasia no sale del descenso, sigue condenado y cada vez baja más. Independiente, por su parte logró un triunfo como visitante después de mucho tiempo.
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Silencio. Desconcierto. Desilusión. La derrota sobre la hora que sufrió Gimnasia ante Independiente, por 2-1, dejó al Lobo en una sitación complicada. Los de Cappa no supieron aprovechar el hombre de más, tras la expulsión de Matheu a los 10 del complemento, y cayeron en el último minuto ante el equipo de Mohamed, que casi sin buscarlo se llevó una valiosa victoria del Bosque.
En la primera etapa fue Gimnasia el que salió decidido a llevarse la victoria. Y se notó. Con la juventud de Joaquín Romea y Juan Neira en la delantera, el Lobo tuvo mucha movilidad en el ataque y fue más que Independiente.
La primera chance de los de Cappa llegó a los 16 minutos y tuvo como intérprete principal a Romea, que tras una gran jugada en la que eludió a tres defensores, no supo como resolver la jugada ante la salida de Assmann, que le tapó el tiro.
Pero la segunda, dos minutos después, iba a tener final feliz para el Lobo ya que Abel Masuero impactó con su cabeza un centro de Luciano Aued y marcó el primer tanto para Gimnasia.
Tras el gol era tal el dominio de los de La Plata que Mohamed, a los 30, decidió sacar a un defensor (Iván Vélez) y poner a un delantero (Facundo Parra). Sin embargo, en esa etapa nada cambió.
En el complemento, en un minuto cambió todo. A los 9 Silvera aprovechó un error de Sessa y marcó el empate para Independiente. Y a los 10, Matheu recibió su segunda amarilla y dejó a su equipo con un hombre menos.
Igualmente, Gimnasia no logró aprovechar la superioridad numérica y no pudo lastimar a Independiente, que se aferró al empate. Los de Cappa buscaron hasta el final el triunfo, sin embargo, en el final iban sonreír los de Mohamed, que con el gol de Pellerano, en el descuento, se llevaron una victoria que casi no buscaron.
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