Triunfo a lo patron

Posted by Lobos de Mar on 11:18 p. m.


24.03.13
Gimnasia venció por 3 a 2 a Patronato en Paraná, en un partido correspondiente a las fecha número 26 del Torneo Nacional B y le sacó dos puntos a Olimpo, ubicándose solo en la segunda posición. El gol que abrió el juego fue obra de Márquez a los 10 minutos, con un disparo desde afuera del área que se le escurrió a Monetti de las manos y se filtró contra el palo derecho. Pero Gimnasia pudo empatarlo mediante un gol en contra de Ramiro López, tras un centro de Musis de tiro libre, que el jugador rechazó sin fortuna. A los 25 se lo perdió Pereyra de cabeza debajo del arco, ya que no le entró de lleno con el parietal izquierdo y el balón se fue muy cerca del poste derecho  de Bértoli. Diez minutos después probó Fondacaro desde afuera del área y Monetti respondió  de manera impecable salvando a Gimnasia de la segunda caída. A los 37 se lo perdió otra vez Patronato, cuando Monetti perdió en el salto con Carignano, que peinó la pelota y no fue gol de milagro, ya que el baló besó el poste derecho. Pisando los 40 el que se lo perdió fue el Lobo mediante Niell, quien se escapó de cara al gol con un gran pase de taco de Nacho pero definió muy mal cuando se enfrentó a Bértoli. Sobre el filo de la primera parte Patronato insistía con patear desde afuera del área y Monetti volvió a responder tras un bombazo de Graciani. En el complemento, el partido parecía bajar un poco la intensidad pero el desenlace dijo lo contrario. La primera fue a los 15, cuando López cabeceó en el centro del área tras un centro de Carrasco pero el balón se fue alto. A los 20, el chico Lachalde, que entró mal en el juego, le cometió penal a Blanco y parecía que el panorama era oscuro. Pero Monetti dijo no y tapó el penal de López contra su poste derecho. En la contra, por cosas que tiene el fútbol, el Lobo anotó el segundo gol. Franco Niell encabezó una contra letal, cedió para Pereyra quien remató cruzado, respondió Bértoli y en el rebote apareció otra vez Niell para empujar al fondo de la red. Pero a los 33 el local llegó al empate tras una buena jugada combinada y Mauricio Carrasco, quien recién había ingresado la colgó del ángulo izquierdo de Monetti y puso el 2 a 2. Sin embargo, enseguida, el Lobo fue a buscar y al minuto anotó el tercero mediante una pelota parada. Llegó el centro desde la derecha y como ante Olimpo, Barsottini empujó al gol de derecha y puso el 3 a 2. A los 42, en una contra bien manejada por el Lobo, García casi anota el cuarto, pero Bértoli tapó contra su poste derecho. Y esta fue la última de un juego que tuvo de todo, en el que Gimnasia impuso su carácter y pudo sumar de a  tres para alejarse de Olimpo y acercarse a Central.

El Lobo se hizo fuerte en Paraná y consiguió un triunfo de oro esta tarde con Patronato. Mucho debió que trabajar el equipo de Troglio en un partido que tuvo de todo y pareció complicarse desde el inicio con un error de Monetti que significó la apertura del marcador para el conjunto local.  Sin embargo, el elenco albiazul no tardó en reponerse. Hubo devolución de gentilezas y, luego de un rechazo defectuoso del defensor de Patronato, Ramiro López, llegó la igualdad tripera.  Pese a los errores de la apertura, el primer tiempo mostró una leve supremacía del Lobo. Mejor juego asociado y algunas chances de riesgo para dar vuelta la historia, aunque las emociones principales llegarían en el complemento. Durante los primeros veinte minutos del segundo tiempo no se evidenciaron mayores sobresaltos, pero surgió otro momento clave del partido con Monetti como protagonista. El arquero del Lobo demostró además de su capacidad técnica, la fortaleza mental suficiente para sobreponerse del mal trago del comienzo y detuvo un penal que Gimnasia capitalizó al instante en el arco rival. Un contragolpe permitió la escapada de Pereyra que dio lugar al gol de Franco Niell. De todas formas, el festejo no duró demasiado. Carrasco aprovechó los espacios y puso el empate transitorio en una igualdad pareció ser el desenlace evidente. Las ganas, el carácter y la necesidad de seguir prendido arriba, obligaron al Lobo a jugarse una de las últimas cartas con un tiro libre de Mussis que Osvaldo Barsottini aprovechó en el final. El tercer gol se gritó con el alma y le puso cifras definitivas a noventa minutos que depositaron a Gimnasia en el segundo puesto y como único escolta de Rosario Central. Un emotivo triunfo y otra enorme muestra de temperamento en esos típicos partidos que hay que ganar para lograr el ascenso. Todavía quedan varias finales por delante, pero siguen firmes las razones para ilusionarse.

¡Qué partido ganó el Lobo! Esa seguramente es la primera reflexión que cruzará la mente de los hinchas de Gimnasia, luego de la importante y trabajosa victoria conseguida frente a Patronato. Sin jugar en su mejor nivel, y sufriendo durante largos momentos del partido los embates de un conjunto entrerriano que le planteó una dura batalla, el equipo dirigido por Pedro Troglio sacó a relucir todo su carácter y se quedó con tres puntos vitales. El Lobo no jugó un gran partido, sobre todo en la segunda mitad, y estuvo cerca de volverse con una derrota en un partido que estuvo para cualquiera de los dos y que bien pudo haber infartado a más de uno. Sin embargo, como ya ocurriese en otros partidos a lo largo de este año, el once de Gimnasia no perdió la calma ante la adversidad, y nuevamente, supo golpear en los momentos justos cuando se le presentó la oportunidad. A la hora de hacer un análisis de lo que fue la segunda mitad, es fácil observar que el Lobo no tuvo la misma cantidad de llegadas que en otros partidos, sino que por el contrario, en las dos primeras que tuvo la mandó a guardar. Con una cuota de fortuna en algunos momentos claves, como en el gol de Niell llevándose la pelota por delante justo después del susto del penal que atajó Monetti, la cuota de templanza que aportó el equipo en todo momento no fue menos importante. El equipo no jugó bien, eso es innegable. No creó ni por asomo las situaciones que si lo hizo en otros partidos, ni en cantidad ni en calidad, pero una vez más volvió a quedarse con los tres puntos, que es lo que debe importar cuando no se puede jugar bien. El fútbol es así, a veces se crean muchas situaciones como frente a Atlético Tucumán y no se logra convertir, y otras, como hoy, con un puñado alcanza para vulnerar al rival tres veces. Lo cierto es que el Lobo ganó y el objetivo del ascenso parece cada vez más cerca, y los hinchas, volverán a La Plata pensando: ¡Qué partido ganó el Lobo!

Gimnasia y Esgrima La Plata venció esta tarde a Patronato de Paraná por 3-2, de visitante, con mucha personalidad para asimilar momentos adversos en un partido jugado por la 26ta. fecha de la Primera B Nacional. Los goles del equipo de Pedro Troglio, que permanece en zona de ascenso, ahora como único escolta del líder Rosario Central, los anotaron Ramiro Lopez en contra (23m.PT), Franco Niell (22m.ST) y Osvaldo Barsottini (35m.ST). Patronato se puso en ventaja con un tanto de Lucas Márquez (9m.PT), después de un error del arquero Fernando Monetti, que se rehabilitó con un penal atajado a Ramiro López (21m.PT) en la acción previa al segundo gol de Gimnasia. El delantero Mauricio Carrasco, iniciado en Estudiantes de La Plata, señaló el 2-2 parcial a los 32 minutos del segundo. Con la victoria, Gimnasia sumó 49 unidades y se distanció a dos puntos de Olimpo de Bahía Blanca, que ocupa el tercer lugar y última plaza de ascenso a primera. Patronato, que acumula 36 puntos, sumó su quinto partido sin victorias, pues llegaba de cuatro empates sin goles en forma consecutiva.

Gimnasia ganó un partidazo que tuvo de todo en Paraná. El 3-2 sobre Patronato, con goles de López (en contra), Niell y Barsottini, le permitió llegar al segundo puesto y seguir soñando con la vuelta a Primera. No hay partidos de Primera pero sí fútbol. Y qué partidazo que hicieron, en Paraná, Patronato y Gimnasia de La Plata. No era una tarea sencilla volverse con los tres puntos, aunque el Lobo se hizo Patrón para un 3-2 que le permitió trepar al segundo lugar de las posiciones. La excursión no podría haber sido mejor para ellos. No empezó bien la tarde, porque a los diez minutos Monetti puso mal las manos ante un remate de Márquez y el local se puso arriba: así le cortó una racha de oncho juegos sin recibir tantos. Pero Ramiro López tuvo una mala jornada y se encargó de igualar con un gol en contra al despejar mal un centro. Como si fuera poco, ejecutó un penal que el arquero Monetti pudo tapar. En una contra inmediata, Fraco Niell lograba dar vuelta la historia. Los dos demostraron el hambre del triunfo, algo que hizo que llegaran dos festejos más. Los dirigidos por Medero-Marini pusieron el 2-2 con un golazo al ángulo de Carrasco, tras una linda pared con Carignano. Apenas unos segundos después apareció Osvlado Barsottini (¿quién si no?) para darle nuevamente la victoria a los de Pedro Troglio. El defensor no para de meterla y llegó a ocho en el torneo. Gran triunfo de Gimnasia, que aprovechó el empate de Olimpo para trepar al segundo lugar de la tabla.

Tremendo y emotivo partido ganó Gimnasia en Paraná. En una prueba de carácter de todo el equipo, el Lobo se repuso a varios momentos adversos y se quedó con tres puntos de suma valía ante Patronato. Fue 3 a 2 con goles de López, en contra, Niell y Barsottini. Monetti, responsable directo en el primer gol del local, atajó un penal y terminó siendo determinante en el resultado final. Con esta victoria, los dirigidos por Troglio le sacaron dos puntos a Olimpo y quedaron como únicos escoltas de Rosario Central, el líder. No arrancó bien parado Gimnasia el partido. Primero porque durante los primeros minutos Patronato se adueñó de la pelota y nunca le dejó generar juego, el arma más importante del equipo de Pedro Troglio. Y segundo, porque en la primera aproximación de riesgo para los locales, sobre los 10 minutos, Fernando Monetti no pudo contener un potente remate desde afuera del área de Lucas Márquez que parecía no correr riesgo para el Mono, pero que sin embargo terminó con la pelota en el fondo de la red, lo que ocasionó un fuerte impacto para el conjunto albiazul y que el arco tripero cierre en 569 minutos sin recibir goles en contra. Este cachetazo del comienzo surtió efecto en Gimnasia, que desprolijo en el fondo y en la mitad de la cancha, le costó una enormidad llegar hasta los dos delanteros, más allá de la conocida movilidad que siempre aportan Niell y Pereyra sobre todo el frente de ataque. Lo curioso es que Patronato nunca supo ni pudo aprovechar este comienzo favorable, dado que en el juego colectivo tampoco es que el conjunto de la dupla incomodó de sobremanera. Por eso no sorprendió que en el primer descuido local el Lobo se pudo encontrar con la igualdad en el marcador: A los 23 minutos Franco Mussis envió un preciso tiro libre que Ramiro López, anticipándose a la entrada de Omar Pouso, se llevó por delante y dejó en ridículo a Sebastián Bértoli, que nada puso hacer, para poner las cosas como en el inicio. A partir de este entonces, Gimnasia pareció reaccionar y se vio lo mejor del equipo. De a poco fueron apareciendo los generadores de juego, llámese Fernández y Mússis, y arriba Pereyra se las ingenió para, con movimientos propios, generar peligro en el arco contrario. Bajo esta regla el delantero tripero avisó con un cabezazo que por poco no fue gol, mientras que más tarde Niell tuvo la chance de poner el 2 a 1 pero también falló en la puntada final. La remontada que evidenció el Lobo promediando la primera etapa se vio contrarrestada pasada la media hora de juego con dos llegas claras para el conjunto local, que si no fuese por la fortuna y la recuperación de Monetti bajo los tres palos podrían haber terminado en gol. La primera, con un cabezazo de Carignano que se fue apenas desviado, y la otra con un fortísimo remate de Graciani que el Mono pudo desviar hacia un costado de buena forma. Así todo, sobre la culminación de este periodo, Niell tuvo la posibilidad de dejar a Pereyra sólo frente a Bértoli, pero el Enano tomó una incorrecta decisión que llevó a que la primera etapa entonces termine 1 a 1, en definitiva lo más justo por lo hecho por ambos equipos. Emocionante. El comienzo del complemento lejos estuvo de mostrar las emociones que sí tuvo el período inicial, dado que ninguno de los dos equipos pudo hacerse dueño de la pelota y ocasionar riesgo sobre las áreas. Recién a los 15 minutos se dio la primera situación clara y fue para el local, con un centro de Machín para López, quien sacó un cabezazo que se fue desviado. Ya sin Nacho Fernández en cancha - lo reemplazó el juvenil Lachalde - Gimnasia perdió juego en el mediocampo. Ni García ni Mussis aparecieron en la dimensión que el equipo lo necesitaba y otra vez los delanteros quedaron muy aislados dentro del circuito de juego. En esa paridad, a los 21 minutos Lachalde le cometió un infantil penal a Almada y, otra vez, parecía que el partido se le complicaba al Lobo. Sin embargo, Monetti recompuso su imagen que había quedado en el gol de Patronato atajando de manera fantástica el remate desde los 12 metros y dejó todo como estaba. Pero por unos segundos nomás. ¿Por qué? Porque en la continuidad del penal atajado por el Mono, Niell agarró la pelota en campo propio y condujo una contra impecable, que derivó en Pereyra, quien remató, Bértoli dio rebote y el Enano, que había iniciado la jugada, terminó marcando el gol. 2 a 1 y a cobrar. Listo, partido cerrado dirían… Nada de ello. Es que doce minutos después, a los 34, cuando el Lobo se había parado de contra y Patronato se fue todo por la igualdad, el recién ingresado Mauricio Carrasco sacó un soberbio disparo de afuera del área que se metió en el ángulo superior izquierdo del Mono Monetti para poner entonces el 2 a 2 en Paraná. Esa cachetada no amedrentó para nada a Gimnasia, dado que en la jugada siguiente, Mussis ejecutó otro preciso tiro libre para que Osvaldo Barsottini, ante la mirada estéril de Bogino, pusiera el 3 a 2 y decretara, ahora sí, la victoria definitiva para el equipo de Pedro Troglio. Tremendo triunfo de Gimnasia. Desde lo matemático y desde lo anímico. El Lobo tuvo una prueba de carácter en Paraná y el equipo respondió con creces. Gimnasia sigue sumando y el objetivo del ascenso está cada vez más cerca. Así, el pueblo tripero se ilusiona.